Los hongos funcionales se posicionan como alternativas para mejorar el bienestar de las personas, con terapias y tratamientos para enfermedades.
Conocemos como hongos funcionales a una variedad de setas que, además de sus propiedades nutricionales básicas, tienen compuestos bioactivos con beneficios para la salud que van más allá de la simple nutrición. En Colombia, por ejemplo, algunas comunidades campesinas e indígenas consumen algunas especies silvestres de hongos y los utilizan para tratar enfermedades.
Reino Fungi y otras clases de hongos
Los hongos, junto con los mohos y las levaduras, conforman el reino Fungi. A diferencia de las plantas, no realizan fotosíntesis, sino que obtienen nutrientes al descomponer materia orgánica. Dentro de este reino, encontramos una gran diversidad de especies, desde los conocidos champiñones hasta los hongos alucinógenos.
El reino Fungi comprende una vasta diversidad de organismos que incluyen a los hongos, mohos y levaduras. Aunque muchas veces se los asocia con las plantas, los hongos son en realidad un grupo único de organismos que tienen su propio reino debido a sus características biológicas particulares.
“Estos se diferencian de las plantas, los animales y otros seres vivos, principalmente porque no realizan fotosíntesis, sino que obtienen su alimento descomponiendo materia orgánica, lo que los convierte en piezas clave para los ecosistemas como descomponedores”, explicó Sergio Andrés Urrego Restrepo, PhD en Química y CEO y fundador de Aitía Biotech.
Dentro del reino Fungi, existen muchos tipos de hongos, algunos de ellos conocidos por sus efectos beneficiosos o adversos.
Clases de hongos y sus características
· Hongos comestibles: Los que se utilizan en gastronomía debido a su sabor y valor nutricional, como el champiñón (agaricus bisporus) y el shiitake (lentinula edodes).
· Hongos venenosos: Son aquellas especies de hongos que pueden ser extremadamente tóxicas e incluso letales si se consumen, como la amanita phalloides, llamada comúnmente “el hongo de la muerte”.
· Hongos alucinógenos: Son hongos que tienen compuestos psicoactivos (sustancias naturales con propiedades beneficiosas para la salud) como la psilocibina, que inducen efectos alucinógenos y que han sido utilizados en algunas culturas con fines rituales, según un estudio realizado por Paul Stamets y Heather Zwickey (Medicinal Mushrooms: Ancient Remedies Meet Modern Science). Estos hongos son actualmente objeto de investigación a nivel mundial en el campo de la psicoterapia.
· Hongos patógenos: Son aquellos responsables de enfermedades en plantas, animales y humanos, como el Candida albicans, que puede causar infecciones en humanos, o el Phytophtora infestans, responsable de la hambruna de la papa en Irlanda.
· Hongos funcionales: Son los que han ganado atención recientemente gracias a sus propiedades, beneficiosas para la salud humana. Algunos de ellos son el reishi (Ganoderma lucidum), melena de León (Hericium erinaceus), cordyceps y maitake (Grifola frondosa), que contienen compuestos bioactivos con efectos inmunomoduladores, antioxidantes, antiinflamatorios y de mejoramiento de la microbiota intestinal.
Esta característica funcional los hace una excelente fuente de prebióticos (un tipo de fibra que alimenta a las bacterias beneficiosas del intestino) y facilitan la producción de moléculas que podrían mejorar el funcionamiento, no solo de nuestro sistema inmune y digestivo, sino también de nuestro sistema nervioso.
Beneficios de los hongos funcionales para la salud de las personas
Los beneficios de los hongos funcionales, incluidos en los alimentos y los suplementos que consumimos, varían según la especie y las condiciones de cultivo. Entre sus aplicaciones tienen usos cosméticos, propiedades antioxidantes, antienvejecimiento, hidratantes y antipigmentantes.
“En general, esta clase de hongos incluyen el fortalecimiento del sistema inmunológico, mejoran el sistema nervioso, aumentan la energía, y actúan como antivirales y potentes antioxidantes”, precisó Urrego Restrepo.
Los hongos funcionales más conocidos y utilizados, como el reishi, melena de león, cordyceps, maitake, shiitake y chaga, son en general, seguros para el consumo humano, siempre y cuando se sigan las dosis recomendadas por un especialista y se utilicen productos de alta calidad, que garantizan estar libres de contaminantes como metales pesados y pesticidas.
El shiitake, por ejemplo, es comercializado en Colombia por tres empresas de la industria farmacéutica colombiana, con el fin de fortalecer el sistema inmunológico y tratar enfermedades como el cáncer, según el proyecto Plantas y hongos útiles de Colombia: Evaluación del estado de los desarrollos bioeconómicos colombianos en plantas y hongos, liderado por el Jardín Botánico de Kew, con la colaboración del Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt.
Su versatilidad los convierte en aliados, tanto para la salud, como para el bienestar en general, pues no solo son seguros para el consumo humano, sino que poco a poco han ganado terreno en otros mercados del mundo.
En Colombia, la regulación del uso de hongos funcionales como ingredientes en alimentos y suplementos aún está en desarrollo. El Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos, Invima, y el Ministerio de Salud adelantan procesos para incorporar en el marco regulatorio la posibilidad del uso responsable de estos ingredientes en productos que beneficien al ser humano desde la parte nutricional, abriendo cada vez más espacios de investigación, gracias a la colaboración entre sectores públicos y privados.
¿Cómo empezar el consumo de los hongos funcionales?
Considerar consumirlos es darle la bienvenida a nuestra vida a un grupo de productos naturales seguros y con beneficios comprobados para la salud, con una dosificación sencilla y una fácil integración a la alimentación diaria.
“Lo importante, al comenzar, es conocer el origen de los hongos que consumes, ya que la forma en la que son cultivados puede influir en la presencia de toxinas indeseadas, como metales pesados o agroquímicos”, aclaró Sergio Urrego Restrepo.
Para garantizar la seguridad de los hongos funcionales se debe revisar que tengan un registro sanitario otorgado por el Invima y consultar con nuestro médico experto en caso de tener alguna condición de salud preexistente.
¿Qué beneficios deseas obtener para tu salud? ¡Seguro que existe un hongo funcional capaz de potenciarlos!